La identidad de Cohoni
Imagen: Claudia Fernández Valdivia
Imagen: Claudia Fernández Valdivia
Ubicado en las faldas del IIlimani, el pueblo ofrece arte colonial y variedad de frutas y verduras
Tiene la ubicación estratégica de un pórtico geográfico. Mira desde las alturas las fértiles riberas del río La Paz. A su espalda está el imponente Illimani, cuyos humedales garantizan el riego de sus múltiples pisos ecológicos incrustados en sus laderas; a 65 kilómetros de la ciudad de La Paz, con accesos al altiplano y valles cochabambinos, Cohoni, desde hace siglos, es una zona de paso y hogar temporal de tiwanacotas, incas, jesuitas y hacendados españoles; todos dejaron su huella en la comunidad donde hoy viven más de 1.000 cohoneños.
Asentamientos tiwanacotas e incas
Cohoni es una comunidad del municipio paceño de Palca; en el lugar se realizaron excavaciones y análisis de restos arqueológicos, líticos y óseos que permitieron determinar asentamientos durante los periodos Horizonte Medio (600-1100 d.C.), Intermedio Tardío (1100-1470 d.C,) y Horizonte Tardío o Inca (1470-1532 d.C.).
Al principio la región fue una zona de paso para los tiwanacotas que se trasladaban del altiplano hacia los valles cochabambinos; en el lugar realizaban ceremonias y rituales por la cercanía al nevado Illimani; posteriormente, y a consecuencia del colapso que sufrió Tiwanaku, hubo un progresivo arribo de personas a la región, quienes optaban por una vida permanente en Cohoni.
“Durante la prospección intensiva —estudio realizado en 2002—, 28 sitios fueron registrados para el Periodo Intermedio Tardío en todo el valle: 11 en la zona montañosa, 13 en la zona de terrazas, 3 en las quebradas laterales y 1 en zona de pastos. Todos los sitios registrados presentaron evidencias de ocupación Tiwanaku previa, reflejando así la continuación de un patrón de asentamiento preexistente durante este periodo”, describió María Soledad Fernández, arqueóloga e investigadora, en La ocupación inka en valle de Cohoni, La Paz.
Los estudios reflejan también asentamientos durante el Periodo Inca (14701532 d.C.) y caminos prehispánicos: “Este tipo de rasgo arquitectónico es muy propio del Periodo Inca y se caracteriza por una elaborada construcción, sendero empedrado con andesita, canales de desagüe, y se encuentra al noroeste del pueblo y es una de las vías más transitadas en la actualidad. En los trechos más amplios el camino presenta 2,5 metros de ancho; mientras que en los sectores más angostos su medida fluctúa entre 1-1.20 metros”, describió Fernández.
Actualmente solo quedan rastros de un tupido sistema de terrazas agrícolas y caminos prehispánicos por la ampliación de la frontera agrícola, acequias y falta de mantenimiento.
Arte en la Iglesia de San Bartolomé
Aún se conserva una serie de 10 cuadros pintados por Leonardo Flores (16501710), artista paceño y uno de los propulsores del barroco mestizo que dejó sus obras más relevantes realizadas en el siglo XVII en las iglesias de Santiago Apóstol de Achocalla, San Bartolomé de Cohoni y Santiago de Collana en el departamento de La Paz.
La iglesia de San Bartolomé, construida por misiones jesuitas e intervenida en los años 60, es uno de los principales atractivos turísticos de Cohoni. Guarda retablos de los siglos XVI y XVII. Mantiene la huella de la época colonial.
“Hay cuadros con temas del Antiguo y Nuevo Testamento, cinco se refieren a pasajes de la vida del Rey David, un cuadro de Esther ante el Rey Asuero, uno de Judith y Holofernes, uno sobre la Cena del rico Epulón y el pobre Lázaro, el Juicio Final y la Conversión de San Pablo”, describió María Isabel Álvarez Plata, investigadora y restauradora de bienes patrimoniales.
“Entendemos entonces que Cohoni presenta dos características únicas en Latinoamérica: la representación de un tema del Antiguo Testamento en una serie tan completa de la vida de David y además, la incorporación de símbolos propios de los indígenas incas que ocupaban la región”, identificó Álvarez.
La iglesia ubicada en la plaza principal celebra cada 24 de agosto la festividad en honor al patrono San Bartolomé; hay misa y procesión de la imagen del santo por las calles principales. Luego los pobladores realizan una entrada autóctona y finaliza con la interpretación de grupos musicales. Es la fiesta más importante del pueblo.
Verduras, flores y hortalizas
Cohoni tiene diferentes pisos ecológicos que van desde los 2.500 metros sobre el nivel del mar hasta los 4.800. Esta diversidad y vertientes permiten la producción de verduras, frutas y flores; brócoli, lechugas, duraznos, papas, choclos, acelgas. Productos que son principalmente vendidos en la ciudad de La Paz.
“De las 4.069 hectáreas de superficie total del municipio de Palca, 2.743 son dedicadas al sector agrícola. Las familias de los Distritos de Cohoni y Quilihuaya tienen la mayor superficie de entre todos los habitantes, con un promedio de 2,5 hectáreas por familia”, revelaron datos del Plan de Contingencia Alimentaria (2020).
Su extensión abarca nevados, cabecera de valle y trópico. Estas características y la disponibilidad de agua para riego representan una ventaja comercial frente a otros productores de la región metropolitana.
Además de la producción agrícola, la comunidad tiene actividad minera. En la región opera la cooperativa minera Cerro Negro, que extrae principalmente wólfram.
Accesibilidad a Cohoni
La vía más utilizada para llegar a Cohoni por el transporte público y camiones de productos es la carretera La Paz-Mecapaca, que cruza Mallasa, El Palomar y Huaricana; la carretera está asfaltada hasta Tawapalca, desde ese lugar hasta Cohoni los caminos son de ripio y en pendiente.
“La subida a Cohoni está fea, tardamos cuatro horas en llegar a la ciudad de La Paz, y cuando llueve no salen las movilidades, ya no hay paso”, comentó Teo Condori, cohoneño.
La otra alternativa, aún más larga, es la carretera La Paz-Palca, que sale por la zona de Chasquipampa, atraviesa Palca y toma el tramo Lacayani-Quilihuaya. El ingreso a Cohoni todavía no está asfaltado.
Conserva una planta en extinción
En Cohoni todavía hay algunos bosques de Polylepis, también conocidos como bosques queñua, ecosistemas únicos en la región andina. Se trata de una especie endémica de Bolivia, distribuida en los Valles Secos Interandinos. Se encuentran bosques a lo largo de la Cordillera Oriental, en los ríos La Paz y Luribay y en los yungas de Inquisivi y Quime. En Cochabamba, solamente se han registrado en Cotacajes. Estos bosques constituyen el hábitat de varias especies de plantas.
La queñua se caracteriza por un tronco cubierto por una corteza que se desprende en delgadas láminas pardo-rojizas. En algunas comunidades los árboles se dejan a manera de cercos alrededor de los cultivos, el tronco es usado como leña para hornos y cocinas domésticas. Además, tiene propiedades medicinales para frenar la fiebre y aliviar el dolor de estómago. Y como uso veterinario, “las hojas sirven para curar el mal de ojo de las ovejas”.
Cohoni recibe a algunos escaladores que desean coronar el Illimani y ver los cuadros de Leonardo Flores. Acoge también a aquellos curiosos que quieren saber por qué tiwanacotas, incas, religiosos, extranjeros llegaron a esa región que forjó su propia identidad.