Potosí habla de su muerte antes de la independencia
Historia. El último libro de Baptista Gumucio recoge el testamento
«(No quiero que asista Oruro porque ya es cadáver frío y esqueleto con mortaja sólo se ha de ver el mío)». Así, la Imperial Villa de Potosí expresa en 1800 su última voluntad para el día de su entierro.
El texto, parte de Testamento de Potosí —escrito anónimo—, fue incluido por el escritor e historiador Mariano Baptista Gumucio en su libro La ciudad de Potosí vista por viajeros y autores nacionales del siglo XVI al XXI.
El autor resalta la belleza tipográfica de la publicación, poniendo como ejemplo sus ilustraciones a color, y la participación en la misma de otros 40 escritores. Está escrito en verso, no en un «español cervantino» pero sí en uno «muy gracioso». Así describe Testamento de Potosí, en el que la ciudad «habla de su muerte años antes de la independencia».
El último libro del historiador fue auspiciado por la Empresa Minera Unificada SA (Emusa) y está dedicado a Mario Mercado Vaca Guzmán, quien «hizo lo que pudo hacer por Potosí mientras vivió». Con su venta se apoyará la creación de un fondo editorial en la Casa Nacional de Moneda.
Contiene escritos de Bartolomé Arzans de Orsúa y Vela, Gabriel René Moreno, Vicente G. Quesada, Carlos Medinacelli, Armando Alba, Carlos Serrate Reich, Valentín Abecia, Eduardo Galeano, Teresa Gisbert, entre otros.
De esa manera, Baptista Gumucio engrosa la colección con la que ya recorrió la historia de La Paz, Pando, Chuquisaca y Oruro. Con ello busca «lograr la autoestima de las poblaciones a través del pasado que han tenido las ciudades, mostrar cómo han crecido y cómo se han vinculado». El escritor ya tiene listas las próximas publicaciones sobre Santa Cruz, Cochabamba y Beni.