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Flash Gordon un ícono de la cultura pop

El héroe nacido en tiras cómicas para periódicos en 1934 saltó, al cómic, el cine y la televisión.

/ 7 de febrero de 2018 / 05:27

Las historietas, los seriales, la película o los dibujos animados han hecho que Flash Gordon sea un mito del siglo XX. En sus 84 años de vida, el personaje ha servido para numerosos estudios en el campo académico y cultural y continúa teniendo influencia en la concepción de la cultura popular. El escritor y semiólogo italiano Umberto Eco incluyó al héroe dentro de las 10 obras más representativas de la cultura occidental.

Flash Gordon nació el domingo 7 de enero de 1934 en una página dominical del poderoso King Features Syndicate, con el dibujo y guion de Alex Raymond, que se inspiró en la novela de Philip Willie y Edwin Balmer When The Worlds Collide. Raymond imaginó el choque entre la Tierra y un misterioso planeta que se había salido bruscamente de su órbita. Indefensa, la población se entrega al pánico y busca una salvación divina. Ahí hace su aparición Flash Gordon, un famoso jugador de fútbol americano de los New York Jets, y Dale Arden, futura novia del héroe, que se lanzan en paracaídas cuando un meteorito alcanza el ala del avión en que viajaban. El destino los lleva al laboratorio del científico Hans Zarkov, que concibe un plan para salvar a la Tierra, obligando a la pareja a ingresar en un cohete para desviar al desconocido planeta de su ruta.

Desde allí, la imaginación de Raymond no conoce límites: los personajes viven un sinfín de aventuras en el planeta Mongo, mientras intentan escapar de las garras del emperador Ming; para luego guiar una lucha revolucionaria que busca sustituir la estructura feudal del planeta, que se divide en pequeños reinos que luchan entre sí, por una república democrática al estilo de EEUU.

El trabajo de Raymond en Flash Gordon constituye, desde el punto de vista gráfico, una de las obras clásicas del cómic estadounidense. El teórico C. Couperie estableció tres fases estilísticas.

Una primera época barroca (1934–1937) —sobre todo a partir de 1935, cuando el dibujante de base académica y realista abandonó Secret Agent X-9 para concentrarse en Flash Gordon— donde los cuadros adquieren un tono épico, donde la figura humana va cobrando protagonismo en los dibujos. Raymond poseía una excelente visión de la composición y sabía que el ritmo, la armonía y la elegancia eran básicos.

Le siguió la época del idealismo (1938–1940), cuando el ilustrador decidió incluso prescindir de los bocadillos o globos de diálogo para no estorbar la estructuración plástica de la viñeta, pues buscaba la composición y el movimiento narrativo en los movimientos de sus personajes. Para ello, Raymond rompió la composición estándar de la página en beneficio de un concepto global, tanto estético como narrativo. De alguna manera, Raymond fue más allá de Harol Foster al dotar de frescura a sus figuras que, por muy estáticas que estuviesen, transmitían cierto movimiento.

Finalmente, está la época del manierismo (1951), en que Dan Barry haría este cómic menos barroco y más científico que su predecesor Alex Raymond, quien representaba los viajes espaciales como una fantasía. Barry, al vivir en un entorno fuertemente científico —por el inicio de la carrera espacial— dio lugar a una auténtica historia de ciencia ficción donde la expresividad y la artificiosidad están presentes. Barry humaniza al protagonista, más vulnerable que el de Raymond.

Este Gordon era un astronauta  que no solo viajaba a Mongo, sino que recorría el espacio y el tiempo conociendo razas alienígenas y humanoides robotizados, en la línea de autores del género como Isaac Asimov o Arthur C. Clark.

La lista de grandes autores a lo largo de los años es variada, desde  Harvey Kurtzman, Robert Kanigher, Frank Frazetta o Wally Wood. Llegó un momento importante con la publicación de nuevas aventuras en formato comic-book con autores como Frank Bolle, Pat Boyette, Reed Crandall Carlos Garzón o Al Williamson, dibujante cuyo estilo bebía de la vertiente de Alex Raymond.

En 1990 Dan Barry dejó la tira luego de casi 40 años; tomaron la posta Ralph Reese (dibujo) y Bruce Jones (guion). Llegando al nuevo siglo, Jim Keefe hizo de forma íntegra el comic de Flash Gordon.

A fines de la década de 1940, la editorial Hispano Americana rebautizó al personaje como Roldán el Temerario para evitar la persecución del régimen de Franco en España, este nombre perduró por varias décadas en países de Latinoamérica. En Bolivia se publicó en el periódico El Diario en su Suplemento de Historietas.

Un personaje tan popular no pasó inadvertido en otros medios de comunicación: en 1935 en EEUU se creó la serie radial The Amazing Interplanetary Adventures of Flash Gordon, con 26 episodios. El cine de seriales de los años 30 de la mano de Universal Pictures produjo en 1936 Flash Gordon, con 13 capítulos en los que Larry “Buster” Crabbe encarnó al héroe, papel que repetiría en Flash Gordon’s Trip to mars en 1938 (15 capítulos) y en Flash Gordon Conquers The Universe en 1940 (12 capítulos).

Entre 1953 y 1954 apareció la serie televisiva Flash Gordon con el protagónico para Steve Holland (39 episodios). En 1979, la compañía de dibujos animados Filmation, produjo una serie animada basada en el cómic.

Un hito se marcó en 1980, cuando Dino de Laurentis produjo la película Flash Gordon. Fue dirigida por Mike Hodges y contaba con Sam J. Jones (Flash), Melody Anderson (Dale Arden), Topol (Dr. Zarkov), Max von Sydow (Ming), Timothy Dalton (Príncipe Barin) y Ornella Muti (Aura). La película es conocida por su banda sonora compuesta e interpretada por el grupo inglés Queen. La película fue un fracaso comercial que tuvo fallos y aciertos, pero hoy se erige como un filme de culto.

En 1982 se realizó también un telefilm: Flash Gordon: The Greatest Adventure of All. Cuatro años después apareció la serie animada Defensores de la Tierra, de la compañía King Features, en que Flash lideraba un equipo de héroes de cómic como The Phantom y Mandrake el mago. Una década después, en 1996 Hearst Entertainment realizó una serie de dibujos animados para la televisión.

Finalmente, el director Stephen Sommers adquirió en 2004 los derechos cinematográficos del personaje. ¿Llegará un remake de la película de los años 80 o de una nueva versión fílmica?

SciFi Channel comenzó la producción de una nueva entrega del héroe en 2007, donde el contacto con Mongo se hace a través de portales de comunicación. Flash (Eric Johnson), Dale (Gina Holden) y sus compañeros van y vienen del inhóspito planeta (que parece inspirado en Mad Max) a la tierra constantemente. En esta nueva versión Ming (John Ralston) ha sido despojado de sus características orientales para ser encarnado por un anglosajón.

Los tiempos han cambiado, pero Flash Gordon permanece. Algunas editoriales como Dynamite o Panini Comics cada cierto tiempo reeditan las aventuras de la era Raymond y Barry con excelente aceptación, pues el héroe de Mongo sigue, y seguirá, en la mente de muchos aficionados a los cómics por muchos años más.

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Superman III 40 años de un humor que no es tan super

La cinta dirigida por Richard Lester, si bien contó con el regreso de Christopher Reeve como el hombre de acero, dejó con sabor a poco

/ 9 de julio de 2023 / 06:21

Hablar de franquicias sobre superhéroes es hablar sobre oportunidades sin pérdidas o fracasos, si bien hay algunas excepciones. Una de ellas sucedió hace 40 años con la saga que comenzó la era de los superhéroes en las salas de cine. La historia de Superman III tiene todas las situaciones necesarias para arruinar una película, desde contar con escritores con ideas que no respetan al personaje hasta productores narcisistas que contratan a un director inepto.

La tercera entrega de la franquicia del hombre de acero la tenía muy difícil, pues tenía que competir con las dos entregas anteriores que habían surgido de la mano de Richard Donner. Si bien el director del tercer capítulo, Richard Lester, se había encargado de reescribir la historia de Superman II tras el alejamiento de Donner. Lester, en esta su segunda y última dirección, causó en el público amor y odio que 40 años después todavía sigue en la mente del colectivo.

Después del éxito de Superman II, los Salkind pensaron que producir una tercera entrega aseguraría la saga para más películas, para ello volvieron a recurrir a Lester quien planteó buscar algo más de humor, alejándose de la trama de las dos primeras. El guion y la historia quedó en manos de David y Leslie Newman quienes, inicialmente pensaron que Superman debería enfrentar a Brainiac y Mr. Mxyzptlk, pero eso originó un problema con los derechos de autor que tenía DC Comic, además de introducir a Supergirl, de quien un año después se estrenaría su película. El filme tenía que llamarse Superman Vs. Superman, pero Columbia Pictures amenazó con una demanda debido a que podían relacionarla con el filme de 1979 Kramer vs. Kramer.

Algunas de las ideas iniciales planteaban que Lois Lane se alejaba, dando paso a Lana Lang como nueva periodista del Daily Planet, el inicio de la cinta nos hubiera trasladado a imágenes de la explosión de Krypton, que se vio en el primer filme, para luego mostrarnos que Kal El no era el único sobreviviente por medio de una secuencia similar que mostraba como los Kent encontraban a Superman, mientras que la otra nave aterrizaría en un planeta oscuro llamado Colu, donde la entidad alienígena Brainiac adoptaría a la niña que venía en esa nave, enamorándose de ella conforme se hacía adulta.

Supergirl terminaría llegando a la Tierra huyendo de los celos de Brainiac, conociendo a Superman y enamorándose ambos inmediatamente. Hasta ese momento no se mencionaba que la nueva heroína era Kara Zor El, que vendría a ser la prima del héroe en los cómics. Con la llegada del villano a la tierra, Superman sería controlado por este, lo cual obligaría a la heroína a rendirse ante él. Entonce aparecería Mxyzptlk, un ser de la quinta dimensión, para el rol se pensó en Dudley Moore, a quien se conoce por películas como Arthur el millonario seductor. Desde este punto lo planeado por los guionistas se sale de control con viajes en el tiempo a la Edad Media y torneos a caballo sin superpoderes, por lo que fue rechazado por la producción debido a la imposibilidad de financiar tales ideas. Al rechazarse la propuesta, los Salkind pensaron en producir una cinta de Supergirl, la que sería una realidad en el olvidable filme de Jeannot Szwarc.

Una vez que se definió como sería el guion se comenzó con la selección de los actores, rápidamente los Salkind buscaron la confirmación de Christopher Reeve como un aliciente para que la Warner viabilice la tercera entrega sin la sustitución molesta del director ni ataduras de guion. Si bien se tenía al actor principal, el problema comenzó con el director, pues las ideas que planteaba Lester desde la segunda película habían molestado a Gene Hackman, actor que interpretó a Lex Luthor, quien se negó a filmar escenas nuevas para Superman II, quien no volvería para asumir su papel. Fue reemplazado por Robert Vaughn, que en el rol de Ross Webster, millonario dueño de Webscoe, que tenía un tono muy similar al Lex luthor de Hackman. Margot Kidder, actriz que dio vida a Lois Lane, también fue casi erradicada de la tercera entrega por observar la actitud que tomó la producción contra Richard Donner. En su lugar apareció Annette O’Toole como Lana Lang, el interés romántico de Clark Kent en su juventud. Muchos años después, O’Toole interpretaría a Martha Kent en la serie de televisión Smallville.

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El alivio cómico fue encargado en el actor Richard Pryor, en el papel de Gus Gorman, quien cuenta que fue elegido por un comentario que realizó Pryor en el show de Johnny Carson, donde dijo que le gustó Superman II y que sería genial poder participar en una futura entrega, los productores al oirlo contactaron rápidamente al actor, ya que querían asegurar los beneficios de la legión de seguidores que tenía el actor en ese momento. Lastimosamente, ni las grandes dotes actorales pudieron contrarrestar los intentos flácidos de humor que tenía el guion que más acercaba al filme a una mala comedia de los 70 que a una película de superhéroes. Y es que la actuación de Pryor no refleja el verdadero tono de su personaje. 

La producción tomó la decisión de que gran parte del filme sea rodada en Canadá y Londres a mediados de 1982. En Londres, los Estudios Pinewood fueron los elegidos porque es el lugar donde se realizó Superman The Movie y varias películas famosas como Alien, Batman, Misión Imposible; James Bond, Transformers: el último caballero, entre otros. Un dato llamativo es que se contrató a un grupo de técnicos de Atari para crear el videojuego que aparece en la película, cuyas imágenes eran tan buenas que a petición de los productores fueron simplificadas para dar la apariencia de un videojuego. El sonido de este corresponde al juego Pac Man.

Lester trabajó con el director de fotografía Robert Paynter, quien le ayudó a concluir Superman II tras la marcha de Richard Donner y fue el encargado de hacer que Superman III luzca visualmente bien, pero nunca pudo alcanzar las características estéticas y visuales de sus predecesoras, especialmente del primer filme o la versión que en 2006 él mismo recuperó y sacó bajo el título de Superman II: The Richard Donner Cut. Claro que no todo es culpa de la dirección, para esta entrega el presupuesto de la misma fue reducido de 59 millones a solo 39, lo que limitó bastante el desarrollo de los efectos y la historia.

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Superman III fue estrenada el 17 de junio de 1983, recaudó $us 80.200.000 en todo el mundo. Aunque no tuvo pérdidas económicas, no fue aliciente para una cuarta entrega. Los Salkind después venderían los derechos a la Cannon, que en esos años eran los expertos en películas de serie B.

Si bien en su momento las críticas y reseñas fueron de mixtas a negativas, el público estuvo más dividido: los seguidores y coleccionista de Superman, si bien saben que la cinta no tiene la calidad de sus predecesoras, consumen cualquier producto que esté relacionado con ella. Un claro ejemplo es que en 2013 la empresa de figuras de acción Hot Toys vendió la versión malvada de Superman de Christopher Reeve que apareció en Superman III, una figura coleccionable exclusiva que en la actualidad es muy buscada por coleccionistas.

Si bien han pasado 40 de esta película, yo la vi muchos años después por primera en su carácter doméstico y lo que más me llamó la atención fue la simpática secuencia de créditos iniciales que era muy diferente a la de sus predecesoras. Si bien en 1978 Superman The Movie había logrado hacer soñar que un hombre podía volar, Superman III nos demostró, parafraseando, que las terceras partes nunca son buenas.

Texto: Juan José Cabrera Rivero

Fotos: Internet

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¡Ya tengo el poder!

Han pasado 35 años desde que la clásica serie de animación sobre He-Man llegó a la pantalla grande con ‘Masters of the Universe’

Por Juan José Cabrera Rivero

/ 22 de agosto de 2022 / 14:11

Hablar de Masters of the Universe, también conocido por sus siglas como MOTU, es hablar de la franquicia de figuras de acción, series de televisión, películas, historietas y videojuegos más exitosa de la década de 1980. La empresa Mattel creó un universo híbrido entre una época medieval y de hechicería mezclado con ciencia ficción. El 7 de agosto se cumplieron los 35 años del lanzamiento de la película con actores reales que intentó revivir esta línea de juguetes.

La historia de este filme, profusa de anécdotas, comienza cuando la empresa Cannon Films, después de varios fracasos como Superman IV: The Quest for Peace o el pago de cifras multimillonarias a actores, apostó por la línea de figuras de acción musculosas de Mattel para ser el comodín que les permitiría escapar de la quiebra.

Para la dirección se eligió a Gary Goddard, para interpretar a He-Man se contrató a Dolph Lundgren, actor que fue conocido por interpretar a Iván Drago en Rocky IV. El actor sueco no fue la primera elección del director, por ser la tercera película que hacía en su carrera, además que su poco dominio del inglés y su falta de confianza fueron aspectos que en la pantalla llegaron a ser muy evidentes. Con todo ello, Lundgren trató de superar sus carencias histriónicas realizando sus propias escenas de acción. Pese a ello, siempre mostró su descontento por haber asumido ese papel.

Entre las anécdotas, Lundgren contó: “Recuerdo que tuve que volar en este disco a través de Whittier, justo al sur de Los Ángeles. E hicimos 58 noches seguidas en este maldito disco. Sabes, estoy allí en pleno invierno sin ropa. Fue difícil”.

El papel del villano Skeletor fue para Frank Langella, quien asumió el papel porque su hijo de cuatro años era un gran fanático de la serie animada. Si bien el actor interpretó al villano a sus 49 años y con una buena condición física, decidió darle al personaje un carácter más espeluznante y amenazante, para ello impuso en el personaje un toque de Shakespeare e improvisó algunas de las líneas. A esto se sumó que el director Gary Goddard, al no tener mucha fe en la forma de actuar de Lundgren, reescribió el guion para que Skeletor fuera el que llevará el peso de la historia, es decir, que narra lo sucedido a través de los ojos del villano. Así, Langella dio forma a la película con su actuación y su imagen se ha grabado a fuego en la mente de muchos fanáticos jóvenes.

Para el papel de la villana Evil-Lyn fue contratada Meg Foster, quien destaca por el color de sus ojos que le añadió un toque especial a su actuación. Para el papel de Gwildor, quien sería el reemplazo de Orko, se contrató al veterano actor Billy Barty. Para dar vida a Man-At-Arms se recurrió a Jon Cypher, quien era más conocido en el mundo de la televisión por aparecer en series como Bonanza, Barnaby Jones y Hospital General, entre otros.  James Tolkan, quien es más conocido por su papel del director Strickland en Back to the Future, dio vida al detective Lubic. Chelsea Field fue la encargada de interpretar a Teela; esta actriz, pese a tener una gran filmografía, es más conocida por esta actuación. Una joven Courteney Cox encarna a Julie Winston, una de las personas que ayuda a He-Man contra Skeletor en la tierra; en ese momento, Cox recién comenzaba a ser conocida en el ámbito del celuloide. El papel de Kevin Corrigan, novio de Julie, fue para Robert Dunca MacNeill, quien es más conocido por su papel como el teniente Tom Paris en la serie de televisión Star Trek: Voyager. Como la enigmática Sorceress estaba Christina Pickles quien apareció en numerosos programas de televisión como Roseanne, Diagnosis Murder, Murder, She Wrote y Friends; pero su papel más importante hasta la fecha ha sido el de la enfermera Helen Rosenthal en el drama médico St. Elsewhere.

La apuesta a la producción de la película fue fuerte, por lo que se presupuestó 22 millones de dólares. El primer borrador del guionista David Odell incluía más escena que mostraban al planeta de Eternia, no solo el Castillo Grayskull aparecía, sino  también lo hacía La Montaña Serpiente; Beast Man podía hablar e incluso se revelaba que la madre de He-Man era originaria de la tierra, como se relataba en la serie animada de Filmation.

Para la elaboración del storyboard se contrató a William Stout, que era un gran fanático del dibujante Jack Kirby y se empezó a inspirar en los New Gods. Al ser el diseñador de producción, Stout comenzó hacerse cargo de los efectos especiales, el vestuario y la escenografía. El primer diseño que se mostró a Mattel no fue del agrado de los empresarios, pues ellos vieron que la espada del héroe tenía sangre y señalaban que He-Man no puede matar. Por esta razón, en el guion se cambió a las criaturas demoniacas del villano Skeletor por androides para que puedan ser destruidos sin necesidad de matar.

A medida que los diseños de Stout destacaban, la producción cada vez se convencía de que había que bajar costos, por ello, muchas de las escenas no contaron con extras y personajes como Orko y Battle Cat que fueron los primeros en quedar descartados por la dificultad de traducirlos en acción real. Durante la producción de la cinta se llevó a cabo un concurso para decidir qué fanático de la caricatura de He-Man obtendría un pequeño rol en el filme. El ganador del concurso fue Richard Szponder, quien interpretó el pequeño papel del secuaz de Skeletor, Pigboy.

A medida que iba avanzando la filmación fue evidente que no había dinero y que casi todo el que se empleaba salió de la parte que dio Mattel. Casi ya finalizando el rodaje se dio la orden de cancelar la película, pues Cannon ya no contaba con recursos para seguir con la misma. En ese momento, el director tomó la decisión de que se filme la batalla final a luces apagadas y con los menores recursos posibles.

Ni siquiera la elaboración de la banda sonora se salvó de percances. Si bien la partitura musical de Masters of the Universe fue compuesta por Bill Conti, el mismo no pudo dirigirla porque había una huelga de músicos y se la tuvo que grabar en el exterior con diferentes orquestas europeas. La Orquesta Graunke de Munich es la única que figura en los créditos del álbum de la banda sonora.

La banda sonora fue lanzada en disco, casete y disco compacto por Varèse Sarabande en 1987. Posteriormente, Edel music sacó una versión ampliada por Edel. En 2008, La-La Land Records lanzó una edición de dos discos con la partitura completa y la presentación del álbum original; en 2012, Intrada Records publicó la partitura completa, la totalidad del disco uno y las pistas 1 a 5 del disco dos, en un disco.

Para su estreno se quiso causar la misma sensación que había producido Star Wars en su momento. A pesar de lanzarse con el apoyo de una línea de juguetes, que en ese momento estaba de caída, Masters of the Universe comenzó como la tercera película más taquillera del fin de semana en Estados Unidos el 7 de agosto de 1987, ganando más de 4 millones de dólares. Finalmente, la película abandonó las salas de cines sin lograr un éxito que ayude a salvar a Cannon o a la franquicia de Mattel.

Cannon Films tenía la intención de crear una secuela de Masters of the Universe, como se puede ver en los créditos finales, para ello se elaboró un borrador que titulaba Masters of the Universe 2: Cyborg; el guion narraba cómo He-Man regresaba a la tierra para luchar contra Skeletor, quien había dominado el planeta. En esta segunda parte harían su aparición Trap Jaw y She-Ra. El único aspecto conocido sobre el guion de la secuela era que He-Man habría regresado a la Tierra disfrazado de mariscal de campo profesional. También se había planeado que el surfista profesional Laird Hamilton reemplazara a Dolph Lundgren como He-Man, pues este ya no quería saber nada del papel. El presupuesto sería de 4.5 millones de dólares, y estaría dirigida por Albert Pyun. El proyecto fue abandonado cuando Cannon no quiso pagar los honorarios de Mattel. En cambio, la producción utilizó los trajes y escenarios ya hechos para la película de ciencia ficción de bajo presupuesto como Cyborg, donde aparece Jean Claude Van Damme.

A mediados de 2009 Sony adquirió los derechos de la película y desde entonces se ha venido hablando de un reinicio. Sería muy largo detallar la lista de directores y actores que se mencionan cada vez que se pone en carpeta un relanzamiento, incluso alguna vez se dijo que el propio Lundgren aparecería interpretando al Rey Randor, el padre del héroe.

El 28 de enero de 2022 se anunció que Netflix había adquirido oficialmente la película de Sony y que Kyle Allen ahora interpretaría a He-Man. También se reveló que Dave Callaham había escrito un nuevo borrador del guion junto con The Nee Brothers. El rodaje está programado para comenzar en Nuevo México en 2023.

Como sucedió con muchas películas que no fueron bien recibidas en el cine, tuvo una aceptación favorable en los medios domésticos. Masters of the Universe se ha convertido en un filme de culto para los seguidores de la franquicia, que ha rebasado la barrera de los juguetes, y para todos aquellos que gustan de las epopeyas ochenteras que nos preveían de un género barato, entretenido y algunas veces duro.

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Nosferatu: 100 años de la película que definió el género vampírico

La cinta del director Friedrich Wilhelm Murnau, basada en la obra de Bram Stoker, se estrenó en Alemania el 15 de marzo de 1922

Protagonista. El actor alemán de cine y de teatro Friedrich Gustav Max Schreck dio vida al temible Conde Orlok.

Por Juan José Cabrera Rivero

/ 14 de marzo de 2022 / 11:55

Hace cinco años comenzaba escribiendo que en el mundo tres de cada cinco personas han escuchado o leído sobre el vampiro Drácula. También señalaba que de esas tres personas, dos habían conocido al personaje por las diferentes películas que se han hecho a lo largo de los años. Este año uno de los filmes más conocidos Nosferatu eine Symphonie des Grauens cumple 100 años y se ha convertido en un ícono cinematográfico de este género.

Nosferatu fue estrenada en Berlín el 15 de marzo de 1922, dirigida por Friedrich Wilhelm Murnau, uno de los grandes nombres del expresionismo cinematográfico alemán. Esta cinta sobre vampirismo es de las pocas en blanco y negro que encontró un lugar sobresaliente dentro la cultura pop.

A lo largo de estos 100 años han surgido diferentes anécdotas y datos que han enriquecido el misterio que rodea a la película, de las cuales se pueden destacar las siguientes.

Al contrario de lo que casi todo buen seguidor del género piensa, Nosferatu no fue la primera adaptación de la novela Drácula del escritor irlandés Bram Stoker. Un año antes Karóly Lajthay había filmado Drakula halála (La muerte de Drácula), que en la actualidad está considerada perdida.

La compañía Prana Film, fundada en 1921 por el empresario Enrico Dieckmann y por el artista y ocultista Albin Grau, produjo Nosferatu. Grau fue quien trajo de la guerra la idea del vampirismo. Según se cuenta, un campesino serbio le había contado que cuando exhumaron el cuerpo de un familiar suyo se percataron de que su cuerpo no estaba en descomposición y que tenía colmillos de vampiro.

El investigador de cine y experto en Nosferatu Rolf Giese señala sobre el filme: “Lo especialmente interesante en Nosferatu es que el terror estaba en la sala de cine, pero también fuera de ella”. Debemos recordar que había terminado la Primera Guerra Mundial y al ser el primer conflicto a gran escala del siglo XX se veía en las calles a cientos de soldados que regresaban con traumas y mutilaciones muy horrorosas, pero no solo era la guerra, pues llegó la gripe española que se propagó por todo el mundo. Para Giese “el vampiro en la pantalla grande era como un mensajero. Era como un virus personificado”.

Con la idea de la realización de la película, Albin Grau encontró el complemento perfecto en Friedrich Wilhelm Murnau, quien junto a Fritz Lang es considerado el más importante director alemán del cine mudo. Lotte Eisner, quien es considerada una de las principales teóricas del cine alemán de ese periodo, se refiere a él como “El gran desconocido”.

Friedrich Wilhelm Plumpe nació en el seno de una familia acomodada que fabricaba textiles. Adoptó el apellido Murnau en honor a una colonia de artistas de los Alpes bávaros. Desde muy joven se interesó en las artes escénicas, llegando a ser alumno de Max Reinhardt, productor y director de teatro y cinematográfico, además de uno de los impulsores del expresionismo en las artes escénicas. Con el estallido de la guerra participó como parte de la Luftwaffe, realizando misiones de combate hasta que fue derribado y pasó el resto de la guerra internado en Suiza, donde después ganaría un concurso nacional de teatro y haría películas de propaganda para la embajada alemana.

Murnau decía: “La cámara es el lápiz del dibujo del director. Debería ser todo lo móvil posible para registrar cada estado de ánimo pasajero y es importante que la cámara no se interponga entre el espectador y la imagen”. Si bien Nosferatu pertenece como obra al expresionismo, rompe algunos parámetros básicos, pues el director, al tratar de dotar de realismo a la historia, no utiliza únicamente espacios asfixiantes y escenarios oblicuos con decorados recargados, sino que filma en locaciones abiertas, espacios naturales, especialmente para describir los bosques, el castillo de Orlok y los caminos que recorre Hutter, lo que nos lleva a pensar que Murnau se inspiró en pinturas de la época, como los trabajos de Alfred Kubin o Franz Marc.

El juego de sombras que usa para aumentar la sensación de angustia es un elemento del expresionismo que le sirvió para sorprender al espectador y describir lo sobrenatural. De igual manera la caracterización de los personajes proyecta la expresión exagerada de las emociones que podemos ver en otras películas de esta corriente europea.

Para el teórico y director de cine francés Alexandre Astruc, Nosferatu muestra en cada fotograma a la muerte. Para Astruc, Murnau era “el mayor poeta que ha conocido la pantalla”. El estilo visual de Murnau sobresale de otros directores por su manera de montar las películas, un estilo elegante y ágil. Nosferatu posee un total de 540 tomas, algo inusual para la época.

Lo que sucedió después de la muerte de Murnau contribuyó a las leyendas que rodean al filme. Antes de que sean repatriados los restos del director, la actriz Greta Garbo hizo una máscara mortuoria de Murnau que le acompañó durante su carrera en Hollywood.  Muchos años después, en la década de los 70, la cripta donde reposan los restos de Murnau fue profanada dejando el ataúd abierto. Finalmente, en julio de 2015, volvieron a profanar la tumba y robaron la cabeza del cineasta, que hoy continúa desaparecida. Según las pesquisas, sobre el ataúd se encontraron restos de cera derretida; un hallazgo que podría tener relación con un ritual satánico.

Friedrich Gustav Max Schreck fue el actor que dio vida al Conde Orlok y es por este papel que es más conocido en todo el mundo. Si bien Grau es el responsable de crear el aspecto ominoso y demacrado del personaje, Schreck (que significa “miedo” en alemán) a lo largo de los años ha estado inmerso en una leyenda negra que afirma que el actor era realmente un no muerto y que el director Murnau le habría pagado para que en la escena final de la película mordiera el cuello de la protagonista. Esta leyenda sirvió de base para la película La sombra del vampiro de E. Elias Merhige (2000), que narra el rodaje de Nosferatu, que es protagonizada por John Malkovich y Willem Dafoe. Dafoe fue nominado al Óscar a Mejor Actor de Reparto por encarnar a Schreck. En 1992, el director Tim Burton, en la película Batman Returns, realiza un disimulado homenaje, pues el malvado que interpreta Christopher Walken se llama Max Shreck.

Después de su estreno, Nosferatu fue un éxito por todo el mundo. Contrario a lo que se puede pensar también fue su condena, pues llamó la atención de Florence Balcombe, la viuda de Bram Stoker, quien demandó a la productora por plagio, logrando que la productora Prana Film se declare en quiebra para no pagar. El juez que atendió la demanda ordenó la destrucción del negativo original y de todas las copias existentes. Afortunadamente algunas copias sobrevivieron y después de la Segunda Guerra Mundial fue rescatada por archivistas y críticos que recopilaban obras del periodo del cine mundo, Henri Langlois, cofundador de la Cinémathèque, y especialmente Lotte H. Eisner tuvieron mucho que ver con su recuperación. En 2019 Nosferatu entró en dominio público. El hecho complicó, no obstante, el panorama de las diversas versiones del filme, que se han multiplicado en el ámbito del cine doméstico. Actualmente la película es considerada una obra cumbre del expresionismo alemán y se ha convertido en patrimonio cultural germano.

En 1979, el director Werner Herzog realizó un remake del Nosferatu de Murnau, Klaus Kinski interpretó al Conde Orlok y Isabelle Adjani hizo el rol de Elle. Esta nueva versión no fue muy bien recibida por la crítica, pues si bien Herzog logra recrear la atmósfera lánguida de ensueño de Murnau, su obra resulta aburrida y está lejos de la obra original.

Termino recordando que la célebre película que definió el género de vampiros sigue atrayendo a un público joven que puede verla con más accesibilidad gracias a plataformas audiovisuales como YouTube, ya que este género continúa impactando a directores y productores del mundo. En palabras del director de cine argentino Bebe Kamin, “no hay un solo director de cine que en el fondo de su corazón no quiera hacer una película de vampiros”. Y es que el célebre vampiro cinematográfico cumple un siglo convertido en un clásico ineludible y acompañado de una leyenda negra empecinada en no desaparecer.

FOTOS: INTERNET

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40 años de la muerte de John Lennon: El legado perdura sobre la sombra

El lunes 8 de diciembre de 1980 el exintegrante de la mítica banda Los Beatles fue asesinado. Los homenajes no han parado en cuatro décadas

/ 23 de diciembre de 2020 / 12:07

Hace 40 años gran parte del mundo quedó conmocionada con el asesinato de John Lennon. Las reacciones se sintieron en los diferentes sectores de la sociedad por la incredulidad, repudio y dolor que causó la muerte del ex Beatle. Hablar de Lennon es mencionar a una de las más grandes estrellas de rock de todos los tiempos, su música ha inspirado a gran parte de los seguidores de este género.

La mañana del 8 de diciembre de 19 80 John Lennon y Yoko Ono recibieron a la fotógrafa Annie Leibovitz para realizar una sesión de fotografías para la Rolling Stone, tres días antes el músico había concedido la que sería su última entrevista. Por la tarde salió junto a su esposa con dirección a Record Plant Studio para mezclar la pista Walking on Thin Ice. Mientras caminaban rumbo a su limusina, fueron rodeados por varios fans que buscaban un autógrafo. Un desconocido, Mark David Chapman, le dio la mano a Lennon y le tendió una copia del nuevo disco de Lennon, Double Fantasy, para que lo firmara. Tras hacerlo, Lennon le preguntó si era todo lo que quería y Chapman le dijo que sí. Este momento fue captado por el fotógrafo Paul Goresh.

Muchas horas después, Lennon y Ono regresaron a su departamento en el edificio Dakota, salieron de su limusina con dirección a la puerta. Chapman observaba a la pareja. Cuando Lennon pasó por su lado, el hombre disparó cinco veces sobre la humanidad del cantante. Cuatro balas produjeron graves heridas y una de ellas perforó su aorta. Lennon, herido, tuvo todavía la fuerza de ingresar hasta el área de seguridad gritando que le dispararon antes de desplomarse.

Lennon fue llevado en una patrulla al St. Luke’s-Roosevelt Hospital Center donde fue declarado muerto al llegar a la sala de emergencias a las 23.15. Firmó el documento el  Dr. Lynn, quien dijo que nadie podría haber sobrevivido a esas heridas.

Los restos de John Lennon fueron cremados en el Ferncliff Cemetery en Westchester; no se hizo ningún funeral. El 14 de diciembre de 1980, millones de personas alrededor del mundo, a pedido de Yoko Ono, mantuvieron diez minutos de silencio en honor a Lennon.  Al menos dos de los fanáticos de Lennon se suicidaron después de su asesinato.

A 40 años del asesinato de John Lennon

BANDA. Los años del éxito de los cuatro de Liverpool: Paul McCartney, George Harrison, John Lennon y Ringo Starr. Foto: AFP

PAREJA. Hasta el día de la muerte del músico, la artista experimental Yoko Ono estuvo junto a su esposo. Fue una gran influencia en él. Foto: AFP

Homenajes a Lennon Foto: AFP

FIGURA. Múltiples homenajes en todo el mundo han acompañado a la familia de Lennon. Con el tiempo ha sido amado y también criticado por su pensamiento. Foto: AFP

Con el tiempo Lennon ha sido amado y también criticado por su pensamiento Foto: AFP

FIGURA. Múltiples homenajes en todo el mundo han acompañado a la familia de Lennon. Con el tiempo ha sido amado y también criticado por su pensamiento. Foto: AFP

Perdura la leyenda

A lo largo de los años, diferentes fueron los homenajes que se realizaron en honor del cantante. El 12 de enero de 1983, B. A. Skiff, en la Estación Anderson Mesa del Observatorio Lowell, descubrió un asteroide que fue nombrado asteroide 4147 Lennon. En 1991 se otorgó a John Lennon un Premio Grammy a toda una vida de logros. Cuatro años después, la República de Abjasia emitió dos sellos postales sobre Lennon. El 8 de diciembre de 2000, el fallecido presidente de Cuba Fidel Castro reveló una estatua de bronce de Lennon en un parque de La Habana. Mientras que el mismo año se inauguró un museo en su honor en Japón. Liverpool renombró su aeropuerto a Aeropuerto Internacional John Lennon y adoptó el lema “Above us only sky” (Sobre nosotros, solo el cielo) en 2002.

Del 28 al 30 de septiembre de 2007, Durness celebró el John Lennon Northern Lights Festival, con la asistencia de Julia Baird (la media hermana de Lennon), quien leyó algunos de los escritos de Lennon. El Salón de la Fama del Rock de Nueva York organizó en 2009 una exhibición especial de John Lennon. En la misma se pudo apreciar recuerdos y efectos personales de la vida de Lennon, pero también incluyó la ropa que vestía cuando fue asesinado, todavía dentro de la bolsa de papel marrón del Roosevelt Hospital.

A lo largo de los años, diferentes músicos hablaron sobre la gran influencia que tuvo Lennon en ellos. Su compañero en los años de los Beatles Paul McCartney afirmó: “John será recordado por su contribución única al arte, la música y la paz del mundo”. Más allá de esto, Paul demostró en múltiples ocasiones el respeto y cariño que tenía por su amigo John. Entre otras muestras, McCartney grabó Here Today, canción tributo dedicada a Lennon que incluyó en su álbum Tug of War(1982).

Otro ex Beatle, Ringo Starr, recibió la noticia y junto a su entonces prometida, Barbara Bach, voló desde las Bahamas a Nueva York para acompañar a Yoko Ono. Por su parte, George Harrison expresó: “Después de todo lo que pasamos juntos, tuve y todavía tengo un gran amor y respeto por John. Estoy impactado”. Él compuso la canción All Those Years Ago, un tema que ya tenía perfilado, pero al que cambió la letra para recordar a John y todos aquellos años que vivieron juntos. A través del tiempo, fueron muchas las formas en que los tres músicos recordaron a su excompañero en vida.

Para Keith Richards, de la mítica banda The Rolling Stones, Lennon no solo era sinónimo de buena música sino de filosofía: si ibas a una reunión donde él estaba tenías la seguridad de que podrías encontrar ambas. El también músico Tom Petty afirma que fue una gran influencia musical y lo considera uno de los tres más grandes cantantes de rock. “Si algún día quieres escuchar una gran guitarra rítmica fíjate lo que hizo en A Hard Days’s Nitght, cuando tocaba And I love her, Lennon hacía que la banda explotara”.

Freddie Mercury, Brian May, John Deacon y Roger Taylor tenían una profunda admiración por Lennon; en el disco de Queen Hot Space, la canción titulada Life Is Real lleva la acotación “Song for Lennon”, pues fue dedicada al ex Beatle. En una entrevista en los años 80, Freddie admitió que no le gustaría compararse con el intérprete de Imagineporque, para él, Lennon fue “el mejor de los mejores”.

El también fallecido Kurt Cobain, de Nirvana, era otro gran fan de John Lennon. El productor de Nevermind recuerda haberle escuchado cantando Juliadurante la grabación. Los productores usaron la gran influencia que tenía Lennon sobre Cobain para que éste grabara varias veces su voz y fusionara el resultado en el estribillo de Smells Like Teen Spirit. “John Lennon lo hacía”, fue todo lo que tuvieron que decirle.

Hablar de John Lennon no basta en unas cuantas líneas. Junto con McCartney fue el líder de los Beatles, compuso algunos de los temas que revolucionó el rock. Tras su separación del grupo de Liverpool sobresalió su pensamiento pacifista y progresista, lo que le ganó enemigos y la acusación de comunista. Es impensable lo que hubiese pasado si llegaba a los 80 años, el alcance de su música y su influencia social. Han pasado 40 años de su muerte y la respuesta se obtiene al ver en las redes sociales que miles de personas siguen peregrinando al memorial de la ciudad de Nueva York de Strawberry Fields, un jardín conmemorativo en Central Park dedicado a Lennon, como una mitología que es transmitida de generación en generación. Fanáticos del mundo dejan recuerdos, fotos, grafitis o flores. Algo similar sucede en los muros de los estudios EMI y en las paredes de los estudios de Abbey Road, en Londres. ¿Qué hubiera pensado John Lennon de todo esto?

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Milli Vanilli

Hace 30 años, un fraude hizo bailar al mundo y derivó en la quema de discos

/ 26 de diciembre de 2018 / 04:00

Han pasado 30 años desde la aparición de un dúo alemán de pop y R&B contemporáneo conformado por Rob Pilatus y Fab Morvan que, bajo la producción de Frank Farian, dieron vida a Milli Vanilli. Su debut fue en 1988 en las diferentes radioemisoras del mundo. El sencillo Girl You Know It’s True, vendió más de 7 millones de copias a nivel mundial y les permitió ganar el Grammy al mejor artista revelación en 1990.

Todo comenzó cuando el productor alemán Frank Farian, famoso por su trabajo con Boney M, estaba preparando una nueva formación musical para dejar atrás el sonido disco de los años 1970. Cuenta la leyenda que un DJ de Fráncfort le entregó un vinilo de Numarx, un desconocido grupo de R&B de Maryland, con la canción Girl You Know It’s True que sonaba en las discotecas de los militares estadounidenses en Alemania.

El tema fue la base para que Farian introdujera nuevas bases, instrumentos musicales y unas voces que correspondían a los exmilitares Brad Howell y Charles Shaw.

Lo malo era que los cantantes no respondían a los cánones del atractivo físico marqueteable que el productor quería ofrecer al grupo, así que se puso manos a la obra y empezó a buscar.

Fabrice “Fav” Morvan y Rob Pilatus eran dos jóvenes que se ganaban la vida como bailarines acompañantes de la cantante pop Sabrina Salerno que, al ser vistos por el productor Frank Farian, lo impresionaron con sus condiciones físicas y el atractivo que tenían. Rápidamente,  éste les ofreció que conformen el dúo Milli Vanilli para que interpreten solamente temas en inglés.

El primer disco de Milli Vanilli, All or nothing, fue lanzado el mismo año y alcanzó de inmediato los primeros puestos en los charts musicales de países europeos como Gran Bretaña y Alemania. En la carátula del disco aparecían tanto Morvan como Pilatus, pero no se especificaba quién interpretaba los temas. Así, el mundo conoció a estos dos nuevos jóvenes talentos sin saber que diversos artistas eran los intérpretes (Charles Shaw, John Davis y Brad Howell) en las grabaciones musicales. La idea era simple: estos artistas permanecerían en el anonimato, tanto en los videos como en las presentaciones en vivo y en su lugar se presentarían Morvan y Pilatus.

El éxito inmediato les permitió obtener  un contrato con Arista Records, subsidiaria de Sony Music, una importante casa discográfica estadounidense que les produjo su segundo LP: Girl, you know it’s true. Este disco contenía una nueva versión de los temas más populares del disco anterior y varios temas nuevos que les permitirían alcanzar el disco de platino por sus millonarias ventas. La canción que daba título al álbum llegó a la cima de los puestos de popularidad en EEUU y lo mismo ocurrió con otros singles que el dúo grabó especialmente para el mercado estadounidense (Baby Don’t Forget My Number, Girl I’m Gonna Miss You y Blame It on the Rain), que alcanzaron el puesto número uno de las listas a lo largo de todo el 1989.

Al principio, Rob y Fab no levantaban sospechas entre la prensa porque su fama se limitaba a Europa. Sin embargo, al llegar a Estados Unidos afloraron los periodistas que se preguntaban cómo estos cantantes europeos (francés y alemán) pronunciaban tan bien el inglés cuando cantaban, pero no ocurría lo mismo en las entrevistas que concedían  donde apenas podían hilar algunas frases coherentes en ese idioma.

La entrada de Arista Records no solo supuso éxito para el dúo, también hizo que Farian perdiera cierto control sobre el mismo y ambos integrantes comenzaron  a frecuentar fiestas, protagonizar varios incidentes y mostrar un escaso interés musical en las entrevistas. En contra de los deseos de su productor, Milli Vanilli aceptó una gira de conciertos por EEUU donde estuvieron a punto de ser descubiertos; a finales de 1989, cuando actuaban en un concierto para la cadena MTV en Connecticut, hubo un fallo del playback con repetición en bucle del estribillo de Girl You Know It’s True. Al darse cuenta de la falla técnica, Morvan y Pilatus no tuvieron más remedio que retirarse —bastante avergonzados— a sus camerinos.

En enero de 1990, Milli Vanilli obtuvo tres premios American Music Awards (AMA) al mejor artista revelación, a la mejor canción pop (Girl You Know It’s True) y al mejor artista revelación en R&B. Y el 21 de febrero, en la 32 entrega de los Premios Grammy, fueron galardonados al mejor artista novel. En aquella época, Rob Pilatus llegó a decir a la revista Time que Milli Vanilli tenía “más talento que Bob Dylan, Mick Jagger y Paul McCartney”.

Si bien el éxito estaba presente, Pilatus y Morvan empezaron a presionar a Frank Farian para grabar un nuevo álbum con sus propias voces, muy distintas a las del álbum de debut. Farian lo rechazó de plano, ya que hubiese supuesto la pérdida del control creativo y no les veía capaces de componer. La relación entre el dúo y el productor se deterioró aún más hasta el punto  de que el creador del proyecto decidió revelar la verdad: el 12 de noviembre de 1990 en una conferencia de prensa Farian admitió públicamente que Morvan y Pilatus no eran los verdaderos cantantes de Milli Vanilli, sino que prestaban su imagen y hacían playback sobre canciones interpretadas por otras personas.

Las primeras reacciones fueron las de los fans que exclamaron su decepción, se les retiró el Grammy  y Arista Records eliminó todo su catálogo, haciendo imposible conseguir nuevas copias. Todo esto conllevó al final de Milli Vanilli y condenó a sus dos miembros al ostracismo. En 1991, Frank Farian impulsó el grupo The Real Milli Vanilli con los cinco cantantes que realmente interpretaban los temas, pero no tuvo el éxito esperado.

En lo que respecta a Rob Pilatus y Fab Morvan, formaron el dúo Rob & Fab y lanzaron en 1992 un disco que fue considerado intrascendente. Tras el fiasco de Rob & Fab, Morvan estableció su residencia en Los Ángeles y se dedicó a presentar programas de radio y eventos públicos. Por el contrario, Pilatus protagonizó diversos delitos de vandalismo, consumo de drogas y asalto, por los que incluso fue encarcelado varios meses en 1996, hasta que al final fue hallado muerto en un hotel de Fráncfort por sobredosis el 2 de abril de 1998.

En 2007, Universal Pictures anunció que preparaba una película basada en el éxito y la caída de Milli Vanilli y que contaría con la producción de los magnates Kathleen Kennedy y Frank Marshall. Fab Morvan iba a participar como asesor, pero finalmente el proyecto se quedó en el limbo. Un año antes, en 2006, Hansa Records publicó un recopilatorio de grandes éxitos.

Morvan siguió ligado al mundo del espectáculo: en 2011 lanzó un single en iTunes llamado Anytime y en 2016 se reunió con uno de los cantantes originales, John Davis, y juntos han vuelto a los escenarios como The Milli Vanilli Experience, con su repertorio nostálgico de antaño.

Dos años antes, la inaudita historia de Milli Vanilli inspiró la ópera experimental WOW, que se representó en Nueva York y que representa distintos momentos de la historia del dúo musical: desde sus comienzos artísticos hasta el problema técnico en el escenario que develó que la banda hacía playback, o la rueda de prensa en la que los cantantes se vieron obligados a devolver el premio Grammy. Ésta es una historia de fraude que, con la muerte de Rob Pilatus, se convirtió en tragedia.

Tras 30 años, la leyenda de Milli Vanilli permanece presente con el auge de las redes sociales y la masificación del internet. En diferentes portales se puede ver o escuchar  al dúo que en algunos casos ha sido recibido de buena manera por un nuevo público.  Fab Morvan  y Rob Pilatus han probado que no serán borrados tan fácilmente de la historia musical.

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