Kadhafi se queda pese a aislamiento internacional
El líder libio Muamar Kadhafi acusó ayer a los manifestantes de estar vinculados a la red Al Qaeda y de actuar bajo los efectos de drogas, al tiempo que los presidentes de EEUU y de Francia reiteraron su exigencia de que "cese el uso de la fuerza".
«Esa gente no tiene verdaderas reivindicaciones, sus reivindicaciones son las de (Osama) Bin Laden», aseguró el coronel Kadhafi en un mensaje de audio transmitido por televisión desde Zauiya, a 50 km al oeste de Trípoli, teatro de feroces enfrentamientos.
Según un diario libio, 10 personas murieron y decenas resultaron heridas durante el asalto de las tropas a esa localidad que cuenta con la mayor refinería de petróleo del país. «Ustedes en Zauiya han escogido a Bin Laden», acusó. «Ellos (los hombres de Bin Laden) les han dado drogas», aseguró Kadhafi.
La rebelión popular controlaba ayer una gran parte del este del país y marcaba puntos en el oeste, pero Kadhafi, en el poder desde 1969, no da señales de dar el brazo a torcer ante las protestas ni ante las presiones internacionales para evitar un baño de sangre y una estampida migratoria.
Kadhafi, que ostenta el único título de Guía de la revolución, insistió en que su poder es simplemente «moral», tal como lo hizo el martes al alegar que no podía renunciar a cargos que no tenía.
En esa ocasión, ordenó aplastar la rebelión y se dijo decidido a «luchar hasta la muerte». La sublevación tiene su bastión en la región de Cirenaica, a lo largo de la costa oriental del Mediterráneo libio, desde la frontera con Egipto hasta Benghazi, pasando por Tobruk y Al Baida.
En Al Baida, los muros acribillados a balazos certifican de la violencia de los enfrentamientos entre los rebeldes y los «mercenarios» contratados por Kadhafi. Unos 10 generales y coroneles desertaron y proclamaron su fidelidad a la revolución, bajo los aplausos de la multitud.
Según datos divulgados en París por la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH), la represión del levantamiento que se inició el 15 de febrero había dejado hasta el miércoles por la mañana 640 muertos.
El régimen de Kadhafi está cada vez más aislado. Las críticas vienen tanto de EEUU y la Unión Europea (UE) como de sus vecinos árabes y, en el plano interno, de jerarcas y diplomáticos libios que renunciaron a sus cargos para sumarse a la revolución.
El presidente estadounidense, Barack Obama, juzgó de «escandalosa» la represión y afirmó que los autores de las matanzas deberán responder por sus actos.
El jueves, tras una conversación telefónica con su homólogo francés, Nicolas Sarkozy, ambos exigieron, una vez más, el «cese inmediato del uso de la fuerza», según un comunicado de la presidencia francesa, y evocaron las medidas posibles a tomar contra el régimen de Kadhafi.
Francia informó sobre su intención de convocar a una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad «para sancionar a los responsables de la violencia contra la población civil libia».
Según fuentes diplomáticas en Nueva York que pidieron el anonimato, el Consejo de Seguridad analizará, en una eventual reunión de emergencia en las próximas 48 horas, medidas para presionar a Kadhafi para que frene la represión contra manifestantes.
El Departamento de Estado indicó además que Washington deseaba expulsar a Trípoli del Consejo de Derechos Humanos de la ONU mientras que México anticipó que pediría en la sesión prevista para hoy en Ginebra la suspensión de Libia del cónclave.
El hijo del dictador pide prensa
Seif el Islam, hijo de Kadhafi, negó que haya habido bombardeos contra manifestantes y que se haya asesinado a «centenares o miles de personas», al tiempo que invitó a la prensa internacional a entrar en Libia. «Periodistas extranjeros, libios y diplomáticos, adelante, entren», dijo. EFE
Suministro de petróleo en peligro
Muamar Kadhafi ha vuelto a dirigirse al pueblo libio, esta vez a través de una llamada telefónica que ha transmitido la televisión libia. Sin el tono excesivamente amenazante del discurso anterior, el dictador libio ha seguido señalando a Al Qaeda como responsable de los disturbios y ha advertido de que si siguen las revueltas el suministro de petróleo está en riesgo. «Tenéis que tener cuidado con vuestros hijos, controlarles», ha pedido dirigiéndose a los padres libios. «Tenéis que quitarles las armas», les ha ordenado. Muamar Kadhafi ha transmitido sus condolencias a las familias de los que han muerto estos días, pero para añadir: «Me pregunto si Bin Laden va a pagar las compensaciones a las víctimas». Kadhafi también ha usado la amenaza del corte de suministro de petróleo si no paran las protestas. «Si los ciudadanos no van a trabajar se cortará el suministro de petróleo», ha asegurado el dictador, a sabiendas de que el barril de crudo escala hasta superar los 120 dólares.
Régimen de Kadhafi tambalea en Libia
Presión
El Consejo de Seguridad analizará las medidas posibles para presionar a Muamar Kadhafi a frenar la represión contra los manifestantes después de que el líder libio ignorara las peticiones. AFP
Petróleo
Los precios del petróleo seguían subiendo como la espuma y las bolsas registraron caídas debido al temor provocado en los mercados por la insurrección libia y su posible contagio a otros países. AFP
Italia
El ministro de Defensa de Italia, Ignazio La Russa, aseguró que los barcos de la Marina italiana movilizados hacia las costas libias no pretenden hacer frente a un éxodo de migrantes de Libia a Europa. EFE
OTAN
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, aseguró que la Alianza no tiene intención de intervenir en Libia, donde la violencia ya ha dejado centenares de muertos. EFE
Vaticano
El papa Benedicto XVI dijo hoy que «es urgente resolver los conflictos que están todavía abiertos en la región», en referencia a las revueltas populares que han estallado en algunos países árabes. EFE
Cotizaciones
Los precios del trigo, maíz y soja retrocedieron en Chicago, donde los operadores se interrogan sobre las repercusiones de los levantamientos en el norte de África y Medio Oriente y sobre la demanda de materias primas. AFP
Evacuados
Un segundo vuelo chárter fletado por la petrolera BP para evacuar a sus trabajadores de Libia aterrizó esta tarde, a las 18.13 horas GMT, con 26 personas a bordo en el aeropuerto londinense de Gatwick procedente de Malta. EFE
