La abuela (Grillo) cumple 10 años
‘La abuela Grillo’ es mucho más que una película hermosa y profunda. Es un verdadero fenómeno social silencioso. Cumple 10 años de su estreno y hoy anuncia nueva wawa: un libro ilustrado basado en el cortometraje de animación más exitoso de la historia del cine boliviano
La abuela Grillo no crece, es como Mafalda. Cumple 10 años y su leyenda aumenta sin cesar. La abuela Grillo es un personaje de culto y ha trascendido fronteras, desde América Latina a Japón, desde Rusia a Turquía, pasando por miles de hogares bolivianos. La película es vista una y otra vez, lo único que permanece es la emoción, el sentimiento, la rebeldía, las lágrimas. No hay una sola abuela Grillo, hay tantas como espectadores la han sentido, la han gozado, la han acompañado. El personaje ya no es de sus creadores, ha sido apropiado por millones de personas en todo el mundo que han visto esta obra ícono que trata de concienciar sobre el derecho al agua y mucho más.
La abuela Grillo es el cortometraje más exitoso de la historia del cine y la animación boliviana. También es un verdadero fenómeno social silencioso. La “opera prima” del francés Denis Chapon —animada por un equipo excelso de ilustradores nacionales— es un hiten las redes sociales (entre YouTube y Vimeo ha sido vista por más de dos millones de personas). El público boliviano quiere, desea y sueña con un segundo capítulo, con un tercero, con un cuarto y un quinto. Si Mi sociotuvo una segunda parte, 30 años después. ¿Por qué no resucitar a la Abuela Grillo que nunca murió?
El happy endcombativo con guion de Alfredo Ovando y Liliana de la Quintana (de la productora boliviana Nicobis), el mexicano Israel Hernández y el propio director galo Denis Chapon han enamorado a una gran comunidad de pedagogos, profesoras, cinéfilos y dibujantes. La animación estuvo en manos de un verdadero dream team (equipo de ensueño) del cómic nacional integrado por: Alejandro Alazar Salazar, Cecilia Delgado, Susana Villegas, Joaquín Cuevas, Mauricio Sejas, Miguel Mealla, Román Nina y Salvador Pomar. Estos ocho artistas —seleccionados entre 600 postulantes y 23 elegidos para un taller en La Paz— viajaron finalmente en 2009 a Dinamarca para armar la película estrenada un año después en un intercambio cultural organizado por Hanna Habermann del Centro para la Cultura y el Desarrollo de dicho país nórdico.
“La experiencia en Europa fue un trabajo intenso, arrancamos por el dibujo de la figura humana hasta llegar a los principios de la animación y la narración audiovisual”, recuerda Joaquín Cuevas. El talentoso equipo boliviano se caracterizaba por la motivación y el entusiasmo de aprender. Fue una verdadera escuela.
La abuela Grilloes una mirada al futuro basada en una leyenda milenaria del pueblo ayoreo. Es un corto animado, sin palabras, musicalizado con una canción de la potosina universal Luzmila Carpio (que interpreta al personaje central), uniendo así a los pueblos hermanos de los llanos (el Chaco) con el altiplano. La tonada en quechua especialmente escrita para la película y llamada Chillchi parita (Suave lluviecita) eleva la ternura del cortometraje hasta los cielos y las nubes cargadas de agua. La letra de la canción no fue subtitulada con un propósito bien definido: el público que no entiende el quechua se queda con todo el sentimiento y sensibilidad que esa lengua es capaz de transmitir, de emocionar.
“El impacto, 10 años después, va en aumento. Hay niños pequeños y adultos reunidos juntos en familia viendo por primera vez la película. Hemos creado el año pasado una fan page en Facebook para celebrar este aniversario e interactuar con los espectadores. Hay niños que se saben la canción, hay obras de teatro. Tenemos a chicos y chicas dibujando los personajes. El público se ha apropiado espontáneamente. Hay gente que la ve una y otra vez y se sigue emocionando y llorando. Una madre que vio con su hija y se durmió con la última canción arrullada de Luzmilla. No son cosas que se planean. No planeamos para que se diera en los colegios, que se pasara con la finalidad de concientizar, ha llegado a todos esos lugares sin querer queriendo”, dice uno de los dibujantes, Salvador Pomar.
Los dioses agradecidos
La abuela de la leyenda es la señora de la lluvia. Cuando ella canta, los dioses agradecidos, hacen llover y así reverdece la vida allá por donde ella pasa. En una de esas, la comunidad expulsa a la abuela por culpa de una inundación. Cuando se ve obligada a migrar del campo a la ciudad (en la fábula decide irse a vivir al Segundo Cielo, desde donde envía lluvia cada vez que alguien cuenta su historia), es secuestrada por dos villanos que se dedican al negocio privado de la venta de agua en los barrios más necesitados. Es el despojo de los saberes, es el despojo del agua.
La privatización y el derecho humano al acceso de este recurso público navegan por la película boliviana/danesa durante sus ya míticos 12 minutos 43 segundos. La lucha popular en las calles rompe las cadenas de la abuela Grillo que vuelve a cantar en libertad para beneficio de todos y todas. El recuerdo de la Guerra del Agua y la victoria popular con la expulsión del consorcio británico-estadounidense durante el gobierno de Hugo Banzer Suárez sobrevuelan la obra.
La máxima que nunca falla —“habla de tu pueblo y serás universal”— se cumple a rajatabla de nuevo. El director francés, autor del story board también, cuenta cómo sintió la historia desde sus inicios. “La animación es un arte colectivo y la historia siempre tuvo una intencionalidad universal, nací en el sur de Francia y también en mi ciudad tuvimos problemas de acceso al agua por sequías, en muchos países del mundo saben lamentablemente que significa vivir sin agua potable, por eso la película ha sido tan bien recibida”, cuenta Denis Chapon.
“La abuela Grillo marcó un antes y un después en la animación boliviana, nos dimos cuenta entonces que, como bolivianos, éramos capaces de crear historias nuestras, capaces de creer en nosotros. El límite nos lo ponemos nosotros ahora”, dice MikeMealla. El propio Román Nina trabaja actualmente como director de arte en la primera película animada del cine peruano, Nuna.
El Activismo Medioambiental
El corto ha sido incluso más visto fuera de Bolivia que dentro y ha adquirido una fama como pieza clave para el activismo medioambiental, fuera y dentro de los colegios, fuera y dentro de las organizaciones, sin tener nunca esa intencionalidad. La historia de la película se basa en un mito ancestral del pueblo ayoreo. El ritual se llama asojna (ave sagrada y mítica que actúa para el bien colectivo, temida también por los que obran mal) y está relacionado con la primera lluvia a través de un personaje milenario, el grillo Direjná.
La abuela llega ahora con una wawa también internacional bajo el brazo: el libro de 45 páginas a todo color que editarán en breve la librería social-editorial La Libre de Cochabamba, Comsoc Comunicación Social (un grupo de educomunicadores en Cataluña) y la editorial cooperativa catalana Polen Ediciones. Las ilustraciones estarán a cargo del dibujante Denis Chapon y los textos son de la escritora Claudia Michel. Los ángulos, los fondos, los planos y los personajes pasarán de las pequeñas y grandes pantallas al libro, un viaje al inverso de muchos grandes éxitos editoriales que se hicieron más famosos después en el cine.
El viernes 28 de agosto para celebrar el aniversario, el Espacio Simón I. Patiño proyectó el cortometraje a través de Zoom y Facebook Live y organizó un conversatorio/cumpleaños moderado por Francisco PaquiLeñero con la participación del director y cinco integrantes del equipo creativo. Después de la charla las visualizaciones de la película en las redes sociales aumentaron otra vez sin parar. La hinchada de la abuela Grillo crece y crece. Y quiere más.
La abuelita aventurera
“La primera vez que vi La abuela Grillo era una niña, estaba aún en el colegio en primaria.
Me encantó y luego me interesé por averiguar a qué momento histórico de Bolivia se hacía referencia. Gracias a La abuela Grillo aprendí sobre la Guerra del Agua y nuestra esencia como Bolivia nos. Aún así, el mensaje que transmite es universal. Es fantástico”. (Malu Rueda)
“Tuve la suerte de poder trabajar con la película en una biblioteca popular de Argentina, con audiencia muy linda de menores”. (Cintia Arapa)
“La abuela Grillo nos ha hecho reflexionar para seguir defendiendo la vida y el agua en Oaxaca, México”. (Julián Caballero).
“Pude compartir Abuelita Grillo con diferentes proyectos ambientales en Centroamérica, con jóvenes en universidades y hasta con niños en comunidades mayas. Todos quedaron impresionados, ¡que viva por siempre la abuelita Grillo aventurera! (Marianela Laura Quisbert)
“Siempre que la veo, me caen unas lágrimas. (Ruth Flores)
(*) Para poder ver el video y formar parte de la familia de la abuela Grillo, entra en estas dos direcciones: http://www.youtube.com/user/AbuelaGrillo, https://vimeo.com/11429985
El blog de la película es: https://abuegrillo.blogspot.com/