Latinoamérica está en riesgo de profundizar su pobreza
Cualquier crisis puede llegar a otras 200 millones de personas
La pobreza que actualmente afecta a 133,7 millones de latinoamericanos podría alcanzar a otros 200 millones de personas consideradas vulnerables ante el impacto de alguna crisis, advierte el Programa de Naciones Unidas para el Desarollo (PNUD).
“La población vulnerable con ingresos entre $us 4 y 10 al día” aumentó de 35% en 2000 a 38% en 2012, reveló el estudio “Perfil de estados sociales en América Latina: pobres, vulnerables y clases medias”. El estudio, en un continente marcado por la desigualdad, enfatiza que “no todos han logrado entrar a la clase media: la población en riesgo de caer en pobreza por ingresos alcanza cerca de 200 millones”.
Entre ese segmento, según el informe del PNUD, casi la mitad (98,5 millones) están ocupados y de éstos, 54,4% son trabajadores informales, 49,6% no tiene acceso a servicios médicos, 46,1% no tiene derecho a pensión y 53,2% no tiene contrato laboral.
A pesar del riesgo que más personas caigan en la pobreza, el PNUD destacó como “un logro” la reducción de la proporción de personas viviendo en la pobreza con ingresos menores de $us 4 al día, de 42% en 2000 (189,2 millones de personas) a 25% en 2012 (133,7 millones de habitantes). La clase media, de 21,9% en 2000 (99,6 millones de personas) pasó al 34,3% en 2012 (181,2 millones de personas).
Avance. Entre 2000 y 2012, Perú fue el país donde más creció la clase media, con 19,1 puntos porcentuales (pp), mientras que Bolivia registró la mayor reducción relativa de pobreza (32,2 pp), pero también tuvo el mayor aumento de población vulnerable (16,9 puntos).
Los países que más redujeron la pobreza y la vulnerabilidad, con lo cual aumentaron la clase media, fueron Chile y Argentina. El caso opuesto lo constituyó República Dominicana, donde la clase media disminuyó cuatro puntos como resultado del aumento de la pobreza y la vulnerabilidad.
Para el organismo de la ONU, es “demasiado alta” la proporción de latinoamericanos en riesgo de ver afectado su bienestar en caso de enfrentar algún tipo de crisis.
“Está claro que si los países de la región no reducen sus vulnerabilidades y refuerzan la capacidad de recuperación ante crisis financieras y desastres naturales, no seremos capaces de garantizar, y mucho menos de ampliar los avances en la región en los ámbitos social, económico y ambiental”, declaró la subsecretaria general de la ONU y directora del PNUD para América Latina, Jessica Faieta. Para la representante, el ritmo del progreso social y económico como en cualquier otra región del mundo “es más lento” actualmente que en la década pasada.
Prioridades en la región
“Más que nunca, la región tiene que invertir en protección social universal, particularmente en las fases más críticas de la vida de los latinoamericanos (niñez, juventud y vejez)”, según el PNUD.
Catástrofes causan $us 44.000 MM en daños
Aseguradoras cubrieron el 47% de lo perdido en los desastres naturales
Las pérdidas económicas que dejaron los desastres y las catástrofes naturales en el primer semestre del año se elevaron a $us 44.000 millones, según estimaciones preliminares de la compañía reaseguradora helvética Swiss Re.
El monto de las pérdidas cubiertas por los seguros a nivel mundial fue de $us 21.000 millones, frente a los 25.000 millones registrados en el mismo periodo del pasado año, detalla el grupo suizo en su estudio Sigma, una publicación de referencia para el sector de los seguros.
Las tormentas que se abatieron a mediados de mayo en EEUU han sido la catástrofe natural más cara para los seguros en este periodo, pues les costó unos $us 2.600 millones. Las tormentas de granizo en Francia, Alemania y Bélgica de junio costaron $us 2.500 millones a las compañías. Las condiciones climáticas extremas de este invierno en Japón y en EEUU se tradujeron en un costo de 2.500 millones y 1.700 millones para las compañías de seguros.
En el conjunto del semestre, los costos de las catástrofes naturales que asumieron las compañías fueron de unos 19.000 millones, a los que hay que sumar las pérdidas de 2.000 millones por los desastres causados por el hombre.