Una crisis interminable
Lo que tanto se criticó y sufrió en estos años a nivel directivo no ha cambiado, por el contrario se repiten y surgen nuevos problemas con denuncias de irrespeto a la institucionalidad. Se ve complicado encontrar una línea en la que se pueda tener cierta esperanza para salir a flote.
Está por terminar el primer mes de 2017 y la crisis dirigencial del fútbol boliviano continúa y hasta parece aumentar. Ahora, el conflicto no es entre las denominadas tres cabezas: Federación, Liga y Asociación Nacional, sino que en cada una de ellas las fisuras internas se hacen más grandes y ahondan la compleja situación.
Lo que tanto se criticó y sufrió en estos años a nivel directivo no ha cambiado, por el contrario se repiten y surgen nuevos problemas con denuncias de irrespeto a la institucionalidad. Se ve complicado encontrar una línea en la que se pueda tener cierta esperanza para salir a flote.
El año pasado, Rolando López convocó para el 9 de enero a un Congreso Extraordinario de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) para presentar su renuncia, cuando llegó la fecha no pudo asistir por un tema legal ajeno al fútbol, tampoco envió carta para ratificar su anuncio. ¿Se arrepintió?
El congreso federativo igual se instaló e hizo valer la primera nota enviada por López y los delegados conscientes de que no había carta formal de renuncia terminó sacando al dirigente del cargo y posesionó al vicepresidente Marco Peredo, quien oficia ahora como titular interno con mandato de 90 días para llamar a elecciones.
Para colmo, esta situación vuelve a cobrar trascendencia fuera de las fronteras, porque la Conmebol desde Asunción informa que hechas las averiguaciones y analizados los documentos solicitados no reconoce a Peredo y anuncia una comunicación de la situación a la FIFA.
En el ámbito liguero, la situación tampoco es una taza de leche, hay dirigentes que son observados porque supuestamente no cumplen los requisitos. Por si eso fuera poco, en el plano deportivo mientras los clubes aprueban la apertura extraordinaria del registro y transferencia de jugadores, Bolívar dice que no irá contra las normas, aunque en los hechos igual cede jugadores. ¿Impugnará a Wilstermann y Sport Boys?
Y para completar la situación en la ANF también se cuecen habas, porque siete clubes liderados por Aurora y Always Ready desconocen el acuerdo entre el balompié amateur y la Liga respecto a las transferencias y sistema de ascensos y no solo piden deshacer el mismo, sino quieren la cabeza de Freddy Cortez, su principal dirigente.