Una abismal diferencia
Imagen: Archivo La Razón
Ricardo Bajo
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Introducción: el Gran Poder le gana al fútbol. Una vez más. Hay 70.000 bailarines por el centro de la ciudad y apenas tres mil hinchas cuando arranca el Bolívar vs Real Santa Cruz. Y eso que la curva está a veinte pesitos. Y eso que es el último partido en el Siles hasta dentro de mes y medio. Incluso hay cadenas radiales que se ausentan del estadio. La dirigencia celeste no ofrece – como si lo hizo Always Ready el jueves- entrada gratuita para las madres por su día este próximo lunes. El marketing también se aplaza.
Erwin Saavedra -extrañamente convocado para la selección boliviana- es homenajeado con una camiseta que dice 300. Arrancará de lateral derecho y terminará de ocho. Robatto reserva algunas piezas clave (la dupla brasileña) para el partido del martes por Libertadores frente a Palestino. ¿Es el último partido liguero de Robatto? ¿Se marchará al Ecuador?
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Nudo: la diferencia entre el puntero Bolívar (así terminará la “Academia”, en lo más alto de la tabla) y el colero (en la acumulada) Real Santa Cruz es abismal. La diferencia entre el equipo de Robatto y los que siempre están arriba no es tal. No sabemos si Claure podrá convencer a Robatto para que no se vaya a Guayaquil pero si se marcha el argentino dejará una mala imagen, más allá de los resultados.
El todavía técnico celeste se mostró en los últimas semanas soberbio (con la prensa) y sobrador (con su propia hinchada a la que acusó de no saber de fútbol). Al señor Robatto habrá que decirle -con respeto- que tener (más) la pelota, jugar al ataque, desprotegerse atrás y no tener equilibrio al medio no es un jugar mejor. Otro día hablamos de eso que llaman jugar lindo. La primera parte será un paseo triunfal y terminará dos a cero. Curiosamente, los dos goles llegarán a pelota parada.
Desenlace: la segunda parte sobra. En el fútbol boliviano se juega a medio gas, se disputan medios tiempos y luego todo desaparece. Llegarán dos goles más por inercia. Llegarán porque entra Yomar Rocha para revitalizar la banda derecha (¿de verdad Saavedra ha sido convocado por Zago?); porque entra el “Papu” Velásquez por un desaparecido Henry Vaca. Más tarde saltará también al césped Javier Uzeda, otro jugador joven borrado por Robatto. ¿Jugar bien es dilapidar el talento joven de tu plantel? A Robatto, Bolívar -un club señor- le queda grande.
Post-scriptum: Real Santa Cruz es el candidato más serio para bajar, aunque falten meses para que termine el campeonato. ¿Sobran equipos? Evidentemente sí. El torneo nacional debería tener entre doce y catorce clubes, saneados, con divisiones inferiores, con instalaciones, con potentes equipos femeninos. ¿Quién le pone el cascabel al gato?
(25/05/2024)